Revista nº 74 -Espacio del Poeta
REVISTA LITERARIA DE HABLA HISPANA
Enero 2017
!!!!!!FELIZ 2017¡¡¡¡¡¡
La llama de tu amor
La llama de tu amor fundió mi cera.
Tus manos moldearon mi figura.
Por ti pude elevarme en mi estatura
y asomarme a tu huerto en primavera.
La llama de tu amor hizo que fuera
posible mi ilusión y mi ventura.
Aún me tiemblan tu brazo en la cintura
y el brillo suave de tu cabellera.
Yo sé que soy la luz que por ti luce:
tuya es la fuerza que impulsa y hace
seguir la senda que hasta ti conduce.
Tú le diste a mi canto melodía.
He nacido a tu amor como se nace
al alba tras la noche, cada día.
Acacia Uceta - España
Misterios Orientales
Del libro desnudeces
Siempre me sedujo caminar por atajos serpentinos formados aleatoriamente por las huellas de otros pasos.
Cuando visitaba a mis abuelos, que vivían en un minúsculo y apartado pueblo cordobés, perdido entre sierras y lagos en silencio, jugaba a vagabundear transitando senderos enmarañados por la maleza.
Sabía por los lugareños que uno de esos tantos senderos conducían la cueva de un ermitaño. Se decía que había llegado hacía más de veinte años. Nadie sabía desde donde, ni porqué.
Es un hombre mayor, de espesa barba gris, poca altura, siempre vestido con túnicas de estameña parda y alpargatas blancas. Sólo se aproxima al pueblo cuando necesita alguna provisión.
En mi infancia, temía arrimarme al lugar donde él vivía. Siempre daba la vuelta cuando estaba a escasos pasos de su cueva. Recién en la adolescencia, una tarde donde campeaba la primavera con una luz extraña, coloreando el cielo de oro y ocre, tomé la decisión de llegar. Sabía que había que avanzar tres cuadras por una espesa frondosidad del ramaje.En una calle solitaria, se abría entre la espesura oscura, la boca redonda e incitante que conducía al lugar. Llegue a ella, me agache y entré.Primero caminé inclinada, con pasos cortos y lentos, para terminar reptando por la espesura de arbustos de espinillos que iban dejando huellas inevitables en mi piel.Con cansancio y mi cuerpo cubierto de arañazos, llegué al lugar. Mi corazón latía arrítmico……..
Ada Gil. Rosario-Argentina
El breve encanto
No necesitas cadenas más anchas.
Sabes lo que una pantalla regala.
Cuando discurres alteras la escala
de valor.Te muestras en avalanchas
virtuales de sentido y pinta manchas
tu aerosol en los muros. En las canchas
reinas, ganas bien jugadas revanchas.
Si entras, tu química impregna la sala.
Seduces.La mirada-miel te avala.
No necesitas cadenas mas anchas
Alberto Edel Morales Fuentes- Cuba
Despertar
Con los besos de tu boca
Saber que existes
Y eres todo mío
Qué hermosa paz
Y qué loco albedrío
Soñarte, día a día
Cielo mío
Te sueño, estás en mí
Qué algarabía
Y que tristeza
Profunda despertar
Y encontrar que mi cama
Está vacía
Pero sé, sin embargo
Que no más
Seguirá esta larga espera
Pues presiento
Que algún día llegarás
Alibel Lambert- Argentina
Teñí al mar de Rojo
Teñí al mar de rojo
con la sangre de mí i corazón!
ese corazón herido que tu me dejaste
cuando te marchaste sin i decirme adiós!
le puse sus vendajes, para repararlo
pero fueron inútiles mis esfuerzos
pues mi corazón ya se i había vaciado!
y no quedaba una sola gota más
de ésa sangre que le i diera vida!
Hoy mi corazón yace muerto he inerte
ante tanto dolor que le i causaste!
no supiste entender mi alma de Poeta
ni mucho menos supiste ¡ valorarme!
descubrir que hablábamos en diferentes
idiomas ése fue mi i gran dolor
ver que tu no te esforzaste por entender
mi corazón, mi alma y mis Letras
dónde me refugio para plasmar i mi dolor!
Hoy ya no vale la pena retenerte
sí entre los dos se ha roto el delgado hilo
que un día por cosas de la vida
o del destino fue lo que nos unió.
Amanda Gutiérrez-Seudónimo Amaranta Alvarado-México
Simbiosis
Separadas
por mundos
se buscan
se tocan
En pánico
y arrastrándose
escuchan las señales
Para no destruirse
aislados eslabones
recomienzan.
Ana Romano-Buenos Aires- Argentina
El tiempo y la lluvia
Penetra suave la humedad de la brisa
como el roce tierno de una mano amiga
abre en su andar la senda emotiva
que experimenta y derriba la frontera interna
y permite abrir el reconfortante fluir del alma
La lluvia en caravana de transparente hilado
baja pertinaz desde el plomizo cielo
siento en mi piel el tic-tac de su goteo pausado
inserto en la bruma de tu espacio- tiempo
Me refugio y me conmuevo
donde las pisadas se acallan junto al verbo
es la manifestación divina que enternecida bebo
es el todo y la nada, en un tapiz que arropa mi sueño.
Ha vuelto el orden afuera y adentro…
respiro, me nutro y me permito sembrarme
de juncos y lirios en flor
Mi mirar es nuevo
mi latido recién estrenado
el tapiz violeta del sendero
es la señal indiscutible del paso del tiempo
tiempo fértil para abandonar lo añejo
y amoroso para emprender cristalino vuelo.
Angeles Rocato- Argentina
Sabor a poeta
Quiero letras y palabras,
quiero soñar con burbujas
…. y pensar.
Quiero magia y ser osado,
y no quiero ser espalda
. . . y vivir.
Quiero ser gotas de lluvia
y amanecer con el viento
. . . y pasión.
y ser el leño en el fuego
ardiendo con el amor
. . . y soñar.
Antonio Monzonís Guillén-Valencia-España
El sueño dr Alicia
¿Hacia dónde va el espejismo de un insondable sueño?
quizá a tocar en nebulosas la alquimia de un ratón,
ajando rosas parlanchinas en espejo feérico,
sobre el reinado ajeno, donde se extravió la ilusión
¿A dónde va la gentileza de unos labios cereza?
quizá a buscar el maullido absurdo de un gato rizón
convertida en un mutante, el alma cual ave aritmética
vacila entre la fantasía y la certera razón
La soberbia, desnuda rosas de pálido fulgor
tinte sepia tras lápiz de maravillosa visión
pinta sensualidad sobre rizos del color del sol
que permanecen dormidos en la basta inspiración
Agridulce es la mora, que sabia aconseja en enigma
la locura lleva sombrero, una marmota y sonrisa
corazones de croquet es donde se juega la vida
sobre el dual laberinto insólito, del sueño de Alicia.
Araceli García-México
Sensaciones
Si no fuera un poco serio.
Un poco oscuro, un poco abstracto.
¿Qué sería de mí?¿Qué sería de mí?
Si no fuera un poco extraño.
in poco áspero, un poco lejano.
¿Qué sería de mí?¿Qué sería de mí?
En el mapa de los afectos-
Menudo diablillo.
Si no fueras mi mano.
Si no fueras mi guia.
Si no fueras mi rezo.
Si no fueras mi brazo.
Si no fueras una puerta rota
Una llave doblada, un cerrojo oxidado
¿Qué sería de mi?¿Qué sería de mí?
Arturo Belmar Monares-Chile
Ven jinete a salvarme
Estoy aquí esperándote
en esta tierra gélida.
Sin voz
sin luz
sin hambre
Apenas un suspiro
se escapa de mis labios.
He querido salir de mi cuerpo
sin lágrimas
y encontrar una risa que avive mis andanzas
Mas el frío que acuna mi vida solitaria
ha dejado las huellas de mi sendero infausto.
Nadie sabe que el hielo de mi alma agotada
ha tomado mi piel
mis huesos
mi sustancia
y ya no espero sueños que iluminen mi estancia
Estoy rendida a ti jinete de azabache
ya te veo venir en tu caballo raudo.
Llévame contigo
a descansar de vida
esta vida que ríe en mis espaldas blancas
como la nieve blanca
se incrustó en mis entrañas
Todo ha sido un invento un cuento una fanfarria
Se escapó un mirlo muerto
de mi pecho sediento.
Ven jinete a salvarme de mi dolor añejo
mi alma está maltrecha de esperar tiempos nuevos
y mis huesos quebrados no quieren más tormentos.
Y pon en mi epitafio
“Acá estuvo una dama que olvidó su anhelos”
sin luz
sin hambre
Apenas un suspiro
se escapa de mis labios.
He querido salir de mi cuerpo
sin lágrimas
y encontrar una risa que avive mis andanzas
Mas el frío que acuna mi vida solitaria
ha dejado las huellas de mi sendero infausto.
Nadie sabe que el hielo de mi alma agotada
ha tomado mi piel
mis huesos
mi sustancia
y ya no espero sueños que iluminen mi estancia
Estoy rendida a ti jinete de azabache
ya te veo venir en tu caballo raudo.
Llévame contigo
a descansar de vida
esta vida que ríe en mis espaldas blancas
como la nieve blanca
se incrustó en mis entrañas
Todo ha sido un invento un cuento una fanfarria
Se escapó un mirlo muerto
de mi pecho sediento.
Ven jinete a salvarme de mi dolor añejo
mi alma está maltrecha de esperar tiempos nuevos
y mis huesos quebrados no quieren más tormentos.
Y pon en mi epitafio
“Acá estuvo una dama que olvidó su anhelos”
Beatriz Ojeda-Montevideo-Uruguay
Extinción
No me muero de amor.
Muero por verte
clavada, aquí, en mi cama
y entregada a mi sin prisas
ni retobos; no me muero,
mi amor; no, no me muero,
pero si ya no estás me seco
como una planta que nunca
hayan regado, la lluvia
de mis lágrimas, no consigue
calmar mi seco suelo y...
muero, simplemente, no crezco:
¡me extingo sin tus besos!
Benjamin Araujo- Mexico
No te rindas…
Cuando una lágrima se agite apretada,
y tus ojos se fijen absortos en la nada…
no te rindas.
Cuando tus fuerzas flaqueen angustiadas,
y sientas que tu voz se anuda en la garganta…
no te rindas.
Cuando te decepcionen de forma inesperada,
y hermanos de la vida te den la espalda…
no te rindas.
Cuando se compriman los caminos que surcabas,
y algunos te cierren la puerta en la cara…
no te rindas.
Cuando sientas que la luz-guía se apaga,
porque el combustible del amor no alcanza…
no te rindas.
Nunca te rindas…
dentro de ti habita el alma,
que alumbra rebeldía para cada batalla,
porque siempre hay luz en la distancia
no te rinda…
nunca te rindas
con eso alcanza.
No te rindas
dentro de ti hay lugar
para Dios que no descansa,
para el ángel del amor que te acompaña,
para la mano de éste amigo
que te banca…
que sin que lo convoques, te abraza,
que reza por vos cada día…
llenándote de bendiciones,
tendiendo su mano siempre franca,
para compartir aunque sea un puñado
de su propia esperanza…
Carlos Alberto Giménez-Ushuaia-Tierra de Fuego- Argentina
Amame en el desconcierto
Ámame bajo la noche de la augusta espera;
Donde solaz sopla el viento silente,
Y zigzagueando me encuentras detrás
de una verde higuera; que cómplice
me delata…
Ámame sin prisa y tiempos
Poniendo a volar las hojas colgadas del calendario.
Ámame sobre la eslora de aquel navío esmaltado
Con mil destellos de luna, entre tules de la noche.
Ámame en el desconcierto que se duerme
entre penumbras, palmo a palmo piel y bruma.
Ámame sin claroscuros; o se es blanco
o se es negro, y así en hechizos de un prisma,
pincélame un carmesí con tu boca de mastranto.
Ámame donde el silencio se esconde
en la terneza de un beso,
aquel que sabe a cerezo, con rocíos de alborada
…Y en puntillas me descalzo a encontrarme con la espuma.
Que me abraza, que me arrulla.
Y en donde me ames profundo,
Al final de aquella ola donde descubras mi mundo
En la orilla de mi boca…
Carmen Guzmán Cedeño Cumana-Edo Sucre-Venezuela
Desbordada
Mi cuerpo es mar con tu bravura,
y tu boca el agua que la anega
de la tuya la mía siempre seca,
mi sed de ti, siempre perdura.
Mi océano reclama tu mirada
y tus lunas agitan mareada
la pleamar caliente y desbocada
se ha tornado fija en su postura.
Nadando con el vientre boca arriba
espera por tu sol ser fecundada
con canto de sirena enamorada.
Irrumpe Poseidón, me arrastra oleada
con un grito de voz calcinada.
Mi mar ha sido desbordada.
Clotilde Roman-Gerona- España
Armar la hija
fuera de la hilera,
elegir curvas
que acaricien
la frente y desaten
las cintas del pelo
soslayar los sesgos, y así
sumar, ascender
Vestir los sentidos,
de pianos y danzas
buscando conquistar
la libertad
en un mosaico
translúcido de diferencias
Armar la hija
fuera del tiempo
aunque traiga aflicción y
extenúe el aliento
Espejismo
del otro yo
dibujar un camino
de ajenidad constante
tratando sólo de
armar la hija
Diana Luz Bravi -Rosario-Argentina
¿Quién en la noche del mundo…..
¿Quién en la noche del mundo
vela a un dios desconocido?
Una mujer está muriendo en la sala de enfrente,
ella no sabe que alguien la contempla,
la está llamando un amor que no traiciona
ya sea solo una sombra quien la nombra.
Ella tiene un nombre ahora
y alguien que la llama.
ya sea solo una sombra quien la nombra.
Ella tiene un nombre ahora
y alguien que la llama.
En un momento todos tenemos un nombre inalcanzable
y más tarde somos perros de la calle.
Es tarde-noche,
y una flor se marchita en agua mineral.
Este mundo es terrible
y espantosamente bello.
En un instante cae la noche
y ya no somos nada para nadie.
Héctor Berenguer-Argentina
Guaréceme en el tiempo
Guaréceme en el tiempo,
que ornamenta a tu nostalgia,
y demuéstrame con hechos tangibles,
que tu amor, que tu amor aun me abraza,
ya no dejes que el silencio, se torne una distancia,
atraviesa el meridiano, mi tímida paloma blanca.
atraviesa el meridiano, mi tímida paloma blanca.
Encontraras aquí en mi nido, ese amor…que preño tus ansias.
Jorge Amado Serrano - Argentina
El aguijón de la soledad.
El aguijón
de la soledad
espesa la luz
y ya casi
no advierto las colmenas
las miradas,
la noche.
Trato de incorporarme
y un llamado ancestral
me empuja
hacia el abismo
Laura Falcon.-Puerto Rico
Atardecer
Acaricia el cielo a la madre tierra,
donde se incendia el horizonte
y lentamente se apagan
los rayos incandescentes del sol.
Pinceladas de nubes
decoran el paisaje
tonalidades jaspeadas
en la paleta divina.
Estallan luces de estrellas dormidas,
el corazón late con frenesí,
intrépido e impetuoso
busca y espera caricias, amor.
Aspiro el aire fresco, cuando la noche crece,
una luna llena decora la noche
y el silencio aplasta los impulsos.
Mª del Carmen Latorre-Rosario-Argentina
Llueven esqueletos
En esta lasitud que me consume
que vino precedida por una tormentosa lluvia
de esqueletos mal paridos y desvencijados
que, impertinentemente, reclaman el derecho
a sentir de nuevo el tuétano corriendo por sus venas;
para así poder llevar con dignidad
la imposición maldita del olvido,
algunos de ellos, los más jóvenes,
aún sienten a sus espaldas algo de ausencia añorada,
que va engendrando dolor
en los momentos más absurdos de negra soledad,
cuando una otredad terrorífica
va secando al corazón latente,
y se intuye; en la madrugada infantil que apenas empieza,
un tormentoso trayecto hasta ese lugar que todos desconocen pero, que todos temen.
La muerte,
va dejando su rastro invisible
con un fuerte olor a certeza y un dulce sabor a nada,
y en la memoria, enfurecido,
se empecina el olvido en aniquilar la obviedad,
mientras,
de tarde en tarde llueven esqueletos impertinentes
que atascan los desagües y anegan mi corazón;
que se va diluyendo con el agua
y filtrando en la tierra en busca de su sosegada tumba.
Perteneciente al poemario: Detrás de la memoria
Manuel Diaz Garcia- Madrid- España
El otoño es el olvido
de los versos desnudos,
que dejan caer sus hojas
desnudando el pudor perdido.
Espejismo en el suelo
pisoteado por el adiós
con esencia de nostalgia
que la soledad cubrió.
Almas que con el viento
regresan de la batalla
arrastrada por el silencio,
habita en mi pecho
el cofre mas valioso
donde se refugia el amor,
amarillos sentimientos
y mi extraña ilusión.
Llega el otoño con su silbido,
entre las silvestres madreselvas,
búscalo dentro de tu corazón,
aunque estiércol te parezca,
siempre nacerá una flor…
Maria Sanchez Roman - Cadiz-España
Cuando me hablas
Si lo llamas Amor
si tiene pájaros que anidan en tu mirada
si tiene escuadras finísimas de hilos oscuros cortando el crepúsculo
cuando le hablas
si sientes el absurdo tacto de sus dedos aún cuando se ausenta
y su oído atento a tus silencios
cuando le hablas
cuando le hablas
si sientes el absurdo tacto de sus dedos aún cuando se ausenta
y su oído atento a tus silencios
cuando le hablas
si tiene gusto a sal cuando le echas de menos en las tardes
y te descubres dibujando su luz ahí en lo oscuro
cuando le hablas
y en las noches como ángel testarudo recorres sus caricias
cotidianas y sabes que es bonito sentirle
cuando le hablas
Y luces para él el lino blanco
sobre la piel amada
y cada pétalo cae hasta el túnel
donde su cara descubierta te está guiñando su esperanza
Todo, cuando le hablas
entonces es Amor , aunque a veces sea instrumento desafinado
que evapora notas al espacio
recuerda que tiene mucho de ti y tú de él
y esa armonía de los incendios sin treguas
revistiendo la nostalgia como un musgo
y lo respiras y lo contienes
como la profecía respira en la montaña
¡Alto , es él , que te responde
cuando le hablas!
Marisa Aragón Willner -Argentina
Lágrima
Tiene sabor a hiel amarga.
A sal y a fuego que consume.
A tristeza que inunda
y rebosa el alma.
y rebosa el alma.
A sentimiento puro.
Emoción que nos embarga.
Tiene sabor a océanos perennes.
A soledad y ausencias.
A duelo y despedidas.
Inunda con recuerdos y alegrías
la llama ardiente de la esperanza
apagando todo rastro y energía.
Tiene sabor a miedo y a cansancio.
A todo lo que duele o causa risa.
Desborda las peores pesadillas
y ataca a la ansiedad cuando nos muerde.
Tiene ése mágico sabor de no saber
si llueve el mar con su sonrisa
o simplemente el sufrimiento llueve
dejando un río de marcas en la piel.
Tiene ése don extraño al florecer
en lo trágico y lo cómico en la vida.
Lágrima que empuja sin nacer
escondida en la sangre de la pena.
Es ésa lágrima que nos enferma
y no sirve de consuelo -Es padecer-
Tiene el sabor de todas las derrotas.
A la cruel impotencia que nos mata.
Sabor a desconsuelo. Y nos ataca
también cuando de rabia explotamos.
En el dolor ajeno la encontramos
fluyendo en nuestros ojos -Empatía-
Tiene al nacer otro significado:
es canto de alegría ¡Es sinfonía
de amor! unida a la esperanza.
Y tendrá sabor a réquiem, a elegía
cuando alguien a quien amamos
... Se nos marcha.
Niebla
Nieves María Merino Guerra- Islas Canarias- España
.....desde hace tiempo que quería la luna...
.....desde hace tiempo que quería la luna...
………….vine detrás de la luz de la luna
esa que crece…
sin menguar siquiera
porque habita en la avenida de los deseos
y hace esquina…en tu mirada…
…justo ahí
en donde tus manos
hacen estragos con mis transparencias
en estos solsticios arrebatados…
donde los sures me persiguen
y aún confundidos…
no se definen
entre inviernos y veranos…
Y aquí estás,
con el sol entre tus manos
escribiendo un futuro
…de calor necesitado
…ese que deseo
…ese,
el que
nos hace falta…
…………sin que importen los meridianos.
Pilar Ferrer- Ushuaia- Tierra de Fuego-Argentina
Cinco poemas para Chriss
1
Es obvio que te busco
como se buscan algunas cosas,
que te veo como se mira
el cielo por las tardes
con la cadencia húmeda
del viento,
que te siento con la timidez
de los amanecer,
ese roce de las manos, de las primaveras
enamoradas de las plazas.
Creo que tus ojos
y tu sonrisa se posaron
en mis labios un día,
este hábitat que te brindo
para siempre.
2
Te prometo verte,
a escondidas,
en cada rincón de piel
desconocida, fragmentada
entre las charcas del invierno,
sólo en sueños,
como detrás del humo
del café de las mañanas,
del otro lado,
donde no estoy.
3
No eras vos,
sólo el interminable
ruido de las constelaciones,
estas estrellas solitarias
abrazándome, hablándome
al oído, siguiéndome en
cada conversación,
en cada paso a tu lado,
en cada rostro de otras personas
donde yo te buscaba, en sueños,
así pasé el tiempo, de funeral
en funeral, buscando tu fantasma,
tu orbe sigiloso apuntándome
entre sueños y desperté, asustado,
aún con tu rostro en mi voz,
con tus dedos señalando el día.
4
En fin,
te conté princesa
que encontré entre los cajones,
un día, tu rostro entre las fotografías,
casi desvanecidas,
así como se van yendo, entre
las celosillas las imágenes de los inviernos?
Creo que guardé la llave
en el subconsciente donde despertaste,
donde abrí mi rostro a tu sonrisa,
como un viejo loco frente al mar,
y pensé que había sido la tarde, el tiempo,
así caminé hasta perderme,
hasta sumergirme; te asústate de nuevo?
Es mi manía de verte, entre el wifi
y los muñequitos, como si existieras.
5
En cuántos lugares del tiempo
he de buscarte, en todos,
en todas tus reencarnaciones;
si vuelves en rosa perfumada,
en gotas de lluvia amanecida,
en hoja revuelta de otros pasos,
he de buscarte,
sigiloso, para encontrarte, para asirme
en ti, si vienes en niebla o en rayo de sol,
si vienes aquí entre el humo,
en esta tarde, en el cristal habitado
de esta taza de café, entre su aroma,
entre mis labios, en cada sorbo de ti.
Nicaragua
Rafael Benavente Saavedra-Nicaragua
¿Te acuerdas?
¿de aquel compás sin música?
¿aquella noche sin luces?
¿Te acuerdas?
el universo éramos tu y yo,
la música la creábamos
cogidos de la mano caminando…
el universo éramos tu y yo,
la música la creábamos
cogidos de la mano caminando…
Recuerdo el sabor de cada estrella
que apague de tus labios con los míos,
la luz... de todas las que iluminaron tu mirada.
¿Por qué amaneció?
No hay estrellas,
en los compases solo hay silencios,
y cada noche, tu risa,
aquella despertaba mi alma
me prohíbe morir…
¿Te acuerdas?
te acuerdas que amanecimos juntos
y el día nos regaló veinticuatro horas
donde recreamos la creación de todo
y con esa fuerza lo vivimos.
Sin duda nos sobraron días
nos faltaron amaneceres…
silencios entre miradas,
música en los pentagramas
de nuestros labios.
Amaneció,
si… amaneció.
y todo se quedó allí…
como los sueños,
como tu.
Romero de Buñol-Valencia-España
Tal vez en todo continúas
Algo en mis sueños
iluminan los dedos de luna.
Es ajeno a mi voluntad
porque desafía el silencio.
Tu silencio
No lo sé, aún así
no me rebelo.
Tal vez, en todo continúas.Tal vez
todo sea tu rostro
y todo sea tu cuerpo
Tatiana Aguilera Muñoz- Chile
Soneto 27
Soy el viento que te roza la frente,
voy buscando aliviar mi desventura;
de este, mi mundo, cruel en su amargura,
sólo queda, su soledad doliente.
sólo queda, su soledad doliente.
¿Acaso no ves que soy diferente,
que mi canto amuralla la ternura?
mis versos son enjambres de dulzura
y la esencia de mi alma, transparente.
En playas de mi todo se abastece,
el arca de tu paz en mi morada;
radiante es tu belleza y reluciente...
En virtud de tu amor que me enloquece,
he de llegar a ti, mi dulce amada,
para volverte amar, mujer ardiente.
Tato Ospina -Colombia
Apendi a amar
Aprendí a amar,
con la brisa en la piel,
y el sol ardiéndome el dorso.-
Aprendí a amar,
viendo las olas el río arrastrar,
y los caracoles,
la baba en la arena dejar,
en esos hilos brillantes y frágiles,
sendas endebles que el viento borra,
cuando el polvo se ensaña con el día.-
Aprendí a amar,
sabiendo que amar es risa y dolor,
es rosedal rojo,
y espinas insolentes,
que en silencioso y ordenado batallón,
mis ansias de color destrozan,
y aun así amo amar,
en silencio, en los poemas,
en la voz cálida y profunda,
en la delicada esbeltez,
que me dibujas contra el horizonte,
en las manos suaves,
que los hombros me rozan,
pues el amor es sueño de vida,
evasión de la rusticidad del diario andar,
es el tenue y anhelado oasis,
que rompe el desierto de la impersonal existencia.-
viendo las olas el río arrastrar,
y los caracoles,
la baba en la arena dejar,
en esos hilos brillantes y frágiles,
sendas endebles que el viento borra,
cuando el polvo se ensaña con el día.-
Aprendí a amar,
sabiendo que amar es risa y dolor,
es rosedal rojo,
y espinas insolentes,
que en silencioso y ordenado batallón,
mis ansias de color destrozan,
y aun así amo amar,
en silencio, en los poemas,
en la voz cálida y profunda,
en la delicada esbeltez,
que me dibujas contra el horizonte,
en las manos suaves,
que los hombros me rozan,
pues el amor es sueño de vida,
evasión de la rusticidad del diario andar,
es el tenue y anhelado oasis,
que rompe el desierto de la impersonal existencia.-
Victor Kartsch-Encarnación- Paraguay
Artabán
“El encanto de los Reyes Magos trasciende la inocencia
infantil, porque siempre es necesaria la fantasía en la vida diaria”.
Abel Pérez Rojas.
Como muchos saben, la historia narra el viaje mágico de los tres Reyes Magos de Oriente, que viajaron desde lejos, guiados por una estrella, para llevar regalos a un Rey recién nacido que estaba en un pesebre en Belén. Pero había un cuarto Rey, del cual no se sabía, quien también vio una estrella en el Oriente e inició el largo viaje para reunirse con los otros Reyes, cargando sus valiosos regalos.
Según la historia, los tres Reyes Magos no tuvieron dificultad alguna para llegar a Belén; sin embargo, Artabán, el cuarto Rey Mago, sí los tuvo. Apenas iniciado el viaje, encontró a un exiliado hebreo enfermo, solo, agonizando en el desierto. Lleno de compasión, Artabán atiende al enfermo. Esta demora ocasiona que falte a su cita con los otros Reyes Magos y, en consecuencia, no está presente en el pesebre aquella primera Navidad llena de magia.
Sin embargo, él sigue viajando, en búsqueda del niño Jesús. Poco después, se entera que la vida de otra criatura está en peligro, de acuerdo con el decreto de Herodes; para salvarle, entrega uno de los regalos que eran para el Niño recién nacido. Así, una y otra vez Artabán se detiene para atender a los enfermos, consolar a los oprimidos y dar de comer a quienes en su camino encontraba.
Al final de la historia, Artabán está desesperado y cansado. Ha dedicado treinta y tres años a la búsqueda del niño que le anunciaron nacería para salvar a los hombres; se encuentra en el Gólgota. Aquí descubre que ese niño, el Hijo de Dios, a quien se dedicó a buscar todos esos años, ha sido condenado a morir en la cruz. Sin pensarlo decide comprar la vida de Jesús, pero no le queda ni un regalo. Todo lo que tuvo lo ha dado. Desesperado cae de rodillas llorando amargamente, de pronto escucha una voz desde lejos que le dice:
- En verdad os digo, todo lo que habéis hecho por el más pequeño de mis hermanos, lo habéis hecho conmigo-.
Artabán, el cuarto Rey Mago, comprende que sus regalos sí fueron recibidos por el Señor.
FELIZ DIA DE REYES.
(Adaptación de cuentos navideños de Leo Buscaglia.)
Victoria Gonzáles Badani-Santiago de Chile- Chile
Indice de autores Mes de Enero
|
Nombre |
1ºApellido |
2ºApellido |
titulo |
Pais |
nº |
Orden |
Pag |
|
Acacia |
Uceta |
|
La llama de tu amor |
España |
73
|
1
|
2
|
|
Ada |
Gil |
|
Misterios orientales |
Argentina |
73
|
2
|
3
|
|
Alberto |
Edel |
Morales |
El breve encanto |
Cuba |
73
|
3
|
4
|
|
Alibel |
Lambert |
|
Despertar |
Argentina |
73
|
4
|
5
|
|
Amanda |
Gutierrez |
|
Teñí el mar de rojo |
México |
73
|
5
|
6
|
|
Ana |
Romano |
|
Simbiosis |
Argentina |
73
|
6
|
7
|
|
Angeles |
Recato |
|
El tiempo y la lluvia |
Argentina |
73
|
7
|
8
|
|
Antonio |
Monzonís |
|
Sabor a poeta |
España |
73
|
8
|
9
|
|
Araceli |
Garcia |
|
El sueño de Alicia |
México |
73
|
9
|
10
|
|
Arturo Belmar |
Belmar |
Monares |
Sensaciones |
Chile |
73
|
10
|
11
|
|
Beatriz |
Ojeda |
|
Ven Jinete |
Montevideo |
73
|
11
|
12
|
|
Benjamin.A |
Araujo |
Mondragon |
Extinción |
Mexico |
73
|
12
|
13
|
|
Carlos Alberto |
Gimenez |
|
No te rindas |
Argentina |
73
|
13
|
14
|
|
Carmen |
Guzman |
Cedeño |
Amame en el desconcierto |
Venezuela |
73
|
14
|
15
|
|
Clotilde |
Roman |
|
Desbordada |
España |
73
|
15
|
16
|
|
Diana Luz |
Bravi |
|
Aurora encontró el valle |
Argentina |
73
|
16
|
17
|
|
Hector |
Berenguer |
|
¿Quien en la noche del mundo… |
Argentina |
73
|
17
|
18
|
|
Jorge |
Amado |
Serrano |
Guaréceme en el tiempo |
Argentina |
73
|
18
|
19
|
|
Laura |
Falcon |
|
El agujón de la soledad |
Puerto Rico |
73
|
18
|
20
|
|
Mª del Carmen |
Latorre |
|
Atardecer |
Argentina |
73
|
19
|
21
|
|
Manuel |
Díaz |
Garcia |
Llueven esqueletos |
España |
73
|
20
|
22
|
|
María |
Sanchez |
Roman |
El otoño |
España |
73
|
21
|
23
|
|
Marisa |
Aragón |
Willner |
Cuando le hablas |
Argentina |
73
|
22
|
24
|
|
Nieves. M ª |
Guerrero |
|
Lágrima |
España |
73
|
23
|
25
|
|
Pilar |
Ferrer |
|
Desde hace tiempo que quería la luna |
Argentina |
73
|
24
|
26
|
|
Rafael |
Benavente |
|
5 poemas para Chriss |
Nicaragua |
73
|
25
|
27
|
|
Romero |
De Buñol |
|
¿Te acuerdas? |
España |
73
|
26
|
29
|
|
Tatiana |
Aguilera |
|
Tal vez en todo continúas |
Chile |
73
|
27
|
30
|
|
Tato |
Ospina |
|
Soneto 27 |
Colombia |
73
|
28
|
31
|
|
Victor |
Kartsch |
|
Aprendí a amar |
Paraguay |
73
|
29
|
32
|
|
Victoria |
Gonzales |
Badani |
Altabán |
Chile |
73
|
30
|
33
|
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