domingo, 1 de marzo de 2015

Revista N.º 52 - ESPACIO DEL POETA


         Revista  N.º 52 -  ESPACIO DEL POETA
                           
                             REVISTA LITERARIA DE HABLA HISPANA
                                                                                  

Marzo 2015






                             
                           Diana Terán              “El Llamado”     Arte digital












Un vendedor…




Un vendedor controla cada día
la rebelión de globos, la maraña,
el desorden de cuerdas que acompaña
su soledad tan ácida y vacía.

Hoy la estatua transmite su apatía,
su apariencia de bronce hostil y huraña.
Hoy los cielos padecen la cizaña
de nubes, la maleza de voz fría.

El hato de cometas sobre el río
ya se estira, se encoge en la ribera
y disimula el grito del cohete.

Burbujas de jabón en el hastío,
cien óvalos de plástico en la acera
cambian de dueño a cambio de un billete.







Alejandro Alagón Huesca- España








Revelación





El secreto
aturde
e instila
incoherencia

El dardo
araña
sondeando
el óxido

Despierta
al lector.






Ana Romano- Buenos Aires-Argentina








Jarras de sangre

Tus quejíos encendidos
eran ...
llamas de tragedias
de calores y de fríos
de tanto...
que le querías,
porque nunca te decía
la verdad...
de sus miserias.

Las jarras...
eran de sangre
que de él...
tú te bebías,
era el mar de sus orgías
que te decía tu madre,
eran playas...
eran dunas...
eran tumbas...
eran noches,
también...
millares de lunas
y cantos de pescadores.

Con los dientes del cuchillo,
a muros...
llenos de vientos,
cortaste...
los pies sedientos
de aquel...
tan alto castillo,
llenando jarras de sangre.


Antonio Monzonís Guillén- Valencia- España







Amante clandestino



Recorriendo caminos solitarios
mezo el polvo que desaira mis delirios.
Solo
 triste
defraudado
con la sangre recorriendo mis acequias.
Recorriendo mis arterias anda mi sangre
implacable
iracunda
indomable
desespera por hallarte en algún lado.  
Arduamente yo te busco entre los hombres
arduamente
esperando sorprenderte desarmada
anulada
despojada
despegada
de los brazos del gigante que te atrapa.
Ese amante clandestino que ha usurpado
el lugar que coronaba mis andanzas
con cien fuegos
con milagros
con surtidas ambrosías
que endulzaban el perfil de tus hallazgos
Ese tiempo solitario te ha hechizado
con sus besos de cristal enamorado
y te ha hundido en la sombra
peligrosa
ignorando que yo soy un emisario
de los legos en la voz de lo sagrado.
He venido a salvarte de tu trampa
 desligarte de las cuerdas que te atan
a sufrir sin fundamento la desdicha
sola
triste
atrapada tras la niebla de la vida.
Hoy es día de festejo en la alameda
he provisto tu alma de caricias
desbordando de pasión y  regocijo
caracolas hambrientas de tu viña.

Beatriz Ojeda-Montevideo- Uruguay







Deja palpitar en tus latidos


Deja palpitar en tus latidos
cada una
de mis palabras...
que te habiten,
que te sanen.
Deja que mis palabras
te acaricien,
te cuenten historias
sobre la huella
de tu almohada,
dale el silencio
que arrastra el ámbar
de tu mirada,
deja que te asombren
mientras te hablan
de amor.
Observa la esfera
de mis palabras,
dale la palma de tus manos
para que se adormezcan,
mientras deshacen caricias
en la yema de tus dedos.
Dale a mis palabras
tus labios entreabiertos,
para que hablen
desde tu aliento,
para que besen la espalda
de cada poema.
Recibe mis palabras,
dale la cuenca
de tu vientre,
para que reproduzcan
pájaros indefensos,
mariposas de tul,
frases para enamorar.
Deja que mis palabras
surquen los feriados
de tu espíritu,
que socaven tu respuesta,
que se despeinen
en el viento de tus labios,
en cada suspiro
de tu firmamento.
Dale a mis palabras
la oportunidad
de fermentar la levadura
del pan de tu paz,
de la melodía de tu piel.
Deja que mis palabras
lleguen hasta tu boca,
para que puedas
hablarme con ellas
en una comunicación
simbiótica,
donde sólo somos dos
en la brevedad
de un poema.


Carlos Alberto Giménez- Ushuaia- Tierra de Fuego- Argentina








Me vestiré de lluvia...



Para que como llovizna resbalen tus besos sobre mi piel...
Y vayas regándome esporas con tus manos de hortelano  y florezcan mis poros…
De fragantes jazmines…

Me vestiré de sal...
Para que me confundas tal vez con la bruma y te sumerjas en mi manto azul..
Y con brazadas de alas, halles el cofre escondido en el confín de mi ser...

Me vestiré de azul...
Con rosas en las manos, y así en una rapsodia pasearnos dulcemente
Colmándonos de versos con pétalos de tinta...

Me vestiré de sombras...
Y que a tientas me busques, con la luz de tus manos...y entre sombras y luces
Me digas un " te amo"...

Me vestiré de anclas...
Para fondear tu barco entre algas y corales…entre algas y gaviotas atrapare
una ola, desvisto la tormenta...y me vestiré de viaje, capitán de horizontes...
Y mañana, quizás mañana...nosotros zarpemos…







Carmen Guzmán Cedeño-Curmaná- Venezuela





 Diáspora




En el satén del letargo postrero
rebrotan las fresas que nunca mordimos,
alientos audaces de amores sinceros
que ahora regresan en sueños sumisos.
La carne desnuda es ceniza secreta
y las sábanas pétalos tibios gimiendo,
caminos profundos en línea muy recta
que llevan a verbos salados inciertos.

Fuimos en tiempos retoños del agua
y seremos arena quemando en verano,
a lo lejos dos cuerpos se fraguan
y sudan e ignoran que todo es en vano.





David Reverte-Alicante- España








Viento






Viento
Sudoroso el viento
sopla sin cesar
desea
volar sobre la estepa, sobre el estero
cuando quiere despojarse la sal
y la lluvia le pesa
busca al hombre
y éste, fatigado
seca el sudor de su frente.






Diana Luz Bravi- Rosario- Argentina







Traición









Bribona la noche
Que se consume
En la última seca
De un camino de humo.

Graduación alcohólica
Sin título, sin nobleza
Y la sombra resbala del
Vacío trono del engaño.

Queja de amor fondeado
Que besa como Judas
Con labios de rosa
Y lengua de espina.

[Falaz cosecha
            Cuando otros pájaros
                             Comen las semillas.]











Diego Santiago Cazzaniga- Rafaela- Santa Fe- Argentina












Que mi olfato devuelva  el aroma








Es este mundo
lo mismo que una sombra
en el espejo,
que no está donde está
ni ahí deja de estar.
                                Minamoto no Sametomo 



Que mi olfato devuelva  el aroma a
 té con leche y tostadas de mi abuela  
albahaca  
membrillos 
a pino recién llovido de la cordillera
lavandas en mi almohada
¿por qué no?

Otras memorias también fueron  robadas
que me devuelvan el nombre de las calles de Praga
o el de esa cima en Bangladesh
de mis primeros  lápices de colores
de algunas flores

Que vuelva a mí también
la extraña sensación de  aquel día
cuando palabras azules
danzaron
en puntas de pie.




                     
 Elena Paso- General Roca, Río Negro- Argentina
             
                        







Marmorato

Dado lo escueto de la efeméride, aprovecháremos el espacio para describir al protagonista de la misma. El Negro Marmorato era y es un personaje entrañable. Cómo delata su apodo, es morocho y posee además una fuerza formidable. Hijo de bicicletero, hermano de bicicletero y nieto de bicicletero, Marmorato es bicicletero, aunque también se da maña para reparar cualquier ingenio mecánico.

Para arreglar las bicicletas, solía ponerlas ruedas para arriba, apoyándolas con el manubrio y el asiento en el piso. Esta técnica es habitual en los reparadores de biciclos, pero Mamorato la aplicaba también para otros casos. Por ejemplo, solía poner su moto Panther de 500 Kg. patas para arriba para repararla y también hacía lo mismo con su ratón alemán, que quedaba muy simpático puesto en decúbito dorsal. Además, así cómo daba vuelta una bicicleta o el ratón alemán, también lo hacía con un Valiant o con un Mercedes 1114.

El Negro frecuentaba el “Club Alas Balcarceñas”, del cual es socio fundador y protagonista de muchas de las innumerables anécdotas que allí acontecieron. En una ocasión, este club organizó un torneo de pesca en el arroyo “El Pantanoso”, que instituía premios tanto al bagre más grande como al bagre más chico.

Marmorato ni arrimó con el primero de los premios, que quedó en manos del “Chuleta” Martínez, quien se presentó ante el jurado con su hermana Susana: un espécimen indiscutidamente grande e indiscutida-mente bagre. El Negro luchó durante toda la jornada por el premio al bagre más chico; galardón que finalmente obtuvo con un “bagre sin cola” (especie no catalogada hasta ese momento). Si bien los conocimientos de Marmorato sobre biología acuática no eran muy sólidos, no tuvo inconvenientes es convencer al jurado que al pescadito por él descubierto le correspondía sin duda la categoría de bagre, obteniendo así su merecido premio: 3 botellas de vino “El Zaragozano” y 20 fichas de metegol.


Hombre de espíritu inquieto, el Negro Marmorato solía experimentar con lo que tenía a mano. Farias, el hábil cantinero del “Alas Balcarceñas”, se la pasaba alejando vasos, platos y palitos salados del alcance de Marmorato. Pero él prefería las bicicletas, y con ellas experimentaba. Así, fue el primero en construir, en la hermosa ciudad de Balcarce, una bicicleta tandem en línea y otra tandem vertical. También desarrolló una bicicleta plegable sin bisagras; la misma estaba íntegramente construida con hierros del 12. El Negro simplemente la doblaba en cuatro como un pañuelo para transportarla en su ratón alemán y una vez en destino la desplegaba, la enderezaba cuidadosamente sobre sus rodillas y quedaba lista para  rodar.

Marmorato tiene tanto de fuerte como de bueno. Siendo durante décadas el entrenador de las inferiores del club “Alas Balcarceñas”, me animo a decir que no hubo tipo más querido por los pibes del barrio. Daba gusto verlo y da gusto recordar el equipo completo de baby con la hinchada y todo, viajar en su Valiant rumbo al partido del día.

Va este recuerdo para un gran tipo que hizo todo por nada, pero a quien le dieron todo lo que tenían. Dicen que una sonrisa puede producir milagros; entonces, posiblemente las carcajadas de esos niños felices que siempre lo rodeamos, son el origen y el alimento de esa fuerza descomunal del Negro Marmorato.




Enrique Spinelli- Buenos Aires- Argentina









Nocturno







Los relámpagos iluminan mi cuerpo desvelado.
mientras oigo a la distancia que alguien
repite pausadamente mi nombre
como si fuera el único habitante de la tierra.

¡Escucha bien, seas quien seas
y mírame!: ¡Estoy vivo,
y la lluvia canturrea para mí una fuerte melodía
que me llena de emoción al escucharla!

La rítmica tormenta, el peñón sonoro,
y el quedo paso de la que no se nombra,
son las más sencillas pruebas de que estoy viviendo
y soy feliz, aunque el cielo y el abismo
cierren sobre mí todas sus puertas.

¡Hombre muerto,
contemplar esta belleza
justifica toda la melancolía, el miedo y el insomnio
de esta noche!









Ezequiel feito- Buenos Aires- Argentina












Divino amor…






Que a tu nombre apropias cada melodía
y en la sonrisa envuelves cada rosa
amor que entre colores ingenuo reposas
y esparces volátil tu aroma en alegría.
En ti, la dureza se enternece en dulces gestos
cuando haces presencia en la caricia
y nos sonrojas, nos seduces, nos envuelves
nos despliegas cómo dueños de los sueños
derramando luz en la belleza de la noche.
Divino amor nunca nos dejes
y síguete fundiendo en cada vida.
¡Enciérrate en el reflejo de cada espejo!
¡Enamórate en las miradas que propicias!
Porque la bondad de ti desprende
y tiene rasgos de fe, actitud de humildad
y huellas de paz en cada ser... al llegar un nuevo día.










Grissel Canche Albornoz- Mérida- Yucatán- México











La casa de los ecos





¿ Recuerdas la casa de los ecos ?
Ese oráculo blanco frente al río Paraná
perdido en un rincón del parque Alem.
Toda mi infancia preguntando al otro imaginario,

que me devolvía esa voz propia y ajena.

Los que han nacido con ese grito en su garganta
saben que del eco de uno nace el otro.

Así como un dios nace de la palabra dios,

lo primero se repite dentro de lo último.
Se vive con esa voz como de un sueño.
Cuando esos susurros
nuestros y ajenos,
cesen para siempre,
cuando nos abandonen.
¿Que será de nosotros ?
Ahora que se fueron los años asombrados.
Y los absurdos de siempre nos dan la mano del pésame.
Destiempo que entrecruza vidas y propósitos como marionetas.
A veces un mínimo esqueleto puede sostener la piel y las nubes...
(Pienso en Giacometti ).
Más el poder nombrar a sido dado al hombre.
¿ Quien puede soportar esta pérdida ?
Si hasta un loco no tiene otra cosa que certezas.
Cada cual piensa una cosa y es la otra.
La mitad perdida siempre es nuestra carga.
y lo opuesto la mitad más cierta.
En tiempos remotos escribió Lao Tsé :
"Las cosas se multiplican por minoría
y se aminoran por mayoría"
Así crecieron las artes y disminuyó la codicia.
Hoy la música de los bárbaros
va cerrando uno por uno
los agujeros de la Flauta mágica,
Y los amantes eternos
como Pamina y Papageno,
se han refugiado en la fábula de mi propia infancia.


Héctor Berenguer –Rosario-Argentina








La vida






La Vida me ha llevado de la mano
o ha soltado mi mano, de ofendida.
“Si tu no me has amado” –me decía-
“Si solo amas tus versos y poemas,”
“yo sufro cuando abrevo de tus letras”
“y lloro cuando leo tus poesías”
“son llanto de tu espíritu de tinta”
“no gemidos de reproche, ni son quejas”.

Me ha escuchado, la Vida, responderle:
“mis letras forman parte de mi vida,”
“que a ella le he jurado pleitesía”
“y acato en todo aquello que me ordene”
“si lloro o si río, solamente”
“es que vivo sin esconderme nada”
“es mi forma sentida de adorarla”
“es mi modo sutil de obedecerle”.

Hubo veces que el Sol me ha sonreído
y otras veces que el Sol se me ha negado.
El Sol y la Vida me regalaron   
muchas cosas sabrosas y queridas.
Me ha dado verso, frases y poesía
y para  mi alegría, cuatro flores
de fragante aroma y bellos colores.
En la lejanía, de fértil campiña
me ha dado dos ojos que son mis delicias
y ha llenado mis sueños de canciones.

Vivo orgulloso de esos primores
ya nada más le pido a la Vida.


Ingel Lazaret- Carmen de Patrones- Argentina








Entra la noche

Por las ventanas, por los ojos
de cerraduras y raíces,
por orificios y rendijas
y por debajo de las puertas,
entra la noche.
Entra la noche como un trueno
por las rompientes de la vida,
recorre salas de hospitales,
habitaciones de prostíbulos,
templos, alcobas, celdas, chozos,
y en los rincones de la boca
entra también la noche.
Entra la noche como un bulto
de mar vacío y de caverna,
se va esparciendo por los bordes
del alcohol y del insomnio,
lame las manos del enfermo
y el corazón de los cautivos,
y en la blancura de las páginas
entra también la noche.
Entra la noche como un vértigo
por la ciudad desprevenida,
rasga las sábanas más tristes,
repta detrás de los cobardes,
ciega la cal y los cuchillos
y en el fragor de las palabras
entra también la noche.
Entra la noche como un grito
entre el silencio de los muros,
propaga espantos y vigilias,
late en lo hondo de las piedras,
abre sus últimos boquetes
entre los cuerpos que se aman,
y en el papel emborronado
entra también la noche.


VERSÍCULO DEL GÉNESIS
José Manuel Caballeno Bonald -Jerez de la Frontera (España)

                        







Devuélveme mis sueños






Noche oscilante, calderilla de lunas
que impele voces en la honda espesura,
¿por qué vienes y te llevas mis sueños
y te quedas sembrando silencios?

Calderilla de lunas, noche oscilante
que guardas secretos en la neblina oscura,
¿por qué enfrías mi ser, congelas el alma
y escondes quimeras en la fosa sin fondo?

Noche oscilante, calderilla de lunas
que llegas precisa en el momento indeciso,
¿por qué mis noches son camelias azules
en las sombras de abedules cenizos?

Ven pues y dime: ¿por qué escondes razones
en las dunas del alma y entregas las dudas
para el delirio nocturno que llega y se va
con la luna y las estrellas del cielo?

Ven, mi noche oscilante, entrégame el coro,
que llegue mi musa y me inunde de liras
para loar a la luna, como a otra ninguna
y decirle que me devuelva mis sueños.

Que lleguen sedientos de mis versos y cantos,
que se hinche en mi pecho, en mi entraña
y mis venas, que alucine en mi alma
que me abrigue y se quede conmigo.






Laura maría Gil Ochoa- Medellín- Colombia








La otra orilla.






Un mástil con una vela
desde babor a estribor,
un ancla con su cadena,
capitán y timón.

El paisaje difumina
hilos de plata en la mar;
dirección a la otra orilla,
el barco navega ya.

La otra orilla se acerca,
buenos vientos le guían;
la otra orilla se aleja,
el barco va a la deriva.

A veces, en la tormenta,
pierde la vida misma
y desde lejos le llega,
la otra orilla es poesía.

Y se siente capitán
de su barco y de su vela;
el timón, su talismán,
y en la otra orilla, poeta.







María Isabel Zapata Rives (Mavel Zaves)- Vicar- Almería- España









Vampiro

No sé cómo me pude enamorar de ti
en qué aciago día, en  qué instante,
qué clase de locura fue que cometí
al caer en el hondo abismo de amarte

Ciega hube de ser al no darme cuenta,
a los consejos sabios tapé mis oídos,
a tiempo me salvé de ser tu presa
un aviso celestial me desvió de tu camino

¡A tiempo muy a tiempo! lo comprendí
me saqué la venda y  ví quién eras;
a tiempo me mostraste  tu bajeza
de poco hombre, de cobarde y  vil

Para lavar tu conciencia por dejarme
me arrojaste  a los brazos de otro,
¡de tu mejor amigo!, ¡eres despreciable!
Tú no deberías llamarte ni  hombre

Entérate que no necesito tus favores;
soy demasiado mujer para alguien como tú
Y al hombre que quiera lo elijo yo!
Tú en mi vida estás fuera de lugar

¡Dios libre al mundo de seres como tú!
Vistiendo blanca piel de cordero,
por dentro llevan un lobo implacable
sediento de destrucción y sangre

De angelical sonrisa de monaguillo,
de inocente y pecoso niño de escuela,
nadie notó que dentro de tu boca
escondías los afilados colmillos de un vampiro!

Quisiste alimentarte de mi sangre,
robarme mi vida, mis sentimientos
Cómo me gustaría verte en el infierno,
verte sufrir eternamente, te lo mereces

Pero no soy como tú, de tu calaña,
más que odio me inspiras lástima
los que son como tú terminan solos
sin amor, sin perdón, sin fe, sin compañía

Tus románticas palabras  las detesto;
de un solo bocado te las haría tragar;
me cansé de ti, también me das miedo.
Mejor es dejarte en la basura, ahí  es tu lugar


María José Acuña Beláustegui- Curmaná- Venezuela










Poema interminable










Cojo una sola letra y le pido
"no me duelas,
tú no,
aún puedes estirarte".

Le pellizco una esquina con los dientes,
la deformo, le pinto suelo y techo,
le invento una mirada, la punta de unos dedos,
la pego en los cristales
a mi letra,
hasta que se despega y cae al suelo
y entonces grita,
mi letra llama a otras,
me rodean, susurran una historia
que dolerá, como me duele todo.

Termino de contar,
me sacudo las comas,
cojo una letra,
solo una letra sola
le pido "no me duelas"...







Mayte Sánchez Sempere-Madrid- España








Te miro

Te miro
ignorando tu sexo,
y me pierdo en ese vacío tuyo...,
tan lleno de ti,
donde tu alma se eleva
y tu espíritu puro, aflora.
¿Quién soy? Me pregunto al verte.
Alas para los sueños
alas para la esperanza
alas,¡ala!,alas para la vida.
El azul pueril de tu inocencia
se entremezcla con el verde ávido de mi juventud
que en algún remoto rincón de mi alma
descansaba,
esperando su momento eterno.
De esa unión
nace
un turquesa armónico,
que me está hablando
sin palabras,
que está abrazando mi ser,
y me pregunto, ¿seré?,¿serás?,somos...
Alas para los sueños,
alas para la esperanza
alas,¡ala!,alas para la vida.
Me gustaría,
te digo avergonzado,
poder vaciar mi alma
y elevar mi espíritu
como tú lo haces.
Me sonríes ruborizada,
pareces querer decirme a gritos,
lo que llevas contando, sutilmente
tanto tiempo,
y yo, estoy tan lejos de ti,
tan lejos de mí,
tan lejos del todo,
que he olvidado quien soy,
¿habré perdido la fe?


Panolillo Díaz- España





A ti me rindo



 (in Memoriam)









A ti, me rindo noche, luce resplandeciente,
sobre constelaciones circundando la luna
fulgurante y brillante, caen  lluvias de estrellas.
-
Se irradia sobre el río, ¡Reflejan transparente!
-
Cristalino y salvaje, mana  hacia la laguna,
¡Un sosiego da calma  y  se borran las huellas!
Y la armonía es plena, el silencio me acuna.
-
Inmersa en  sentimientos, fluyen en el  presente.
-
Nada me ata, soy libre, dieron las doce y la una,
se fue  filtrando  el alba, brotando  rosas bellas
y me vestí de sol,  y en paisaje me formo.
-
Con añoranza mágica te amo profundamente.
-
De un verde refrescante clareando el entorno
¡Fuerte me rindo a ti, noche, en alegre exorno!





Pastora Herdugo- Málaga- España









............Calderos

….siempre me han gustado los calderos
…donde cuelgo mis ramos de violetas
en alguna pared desvencijada y llena de nostalgias…
...y hay días en que guardo en los cajones,
algunos que otros recuerdos
que no hacen daño a nadie
y ayudan a los desapegos…

El de mi abuela…
donde aquel maíz triturado,
hacía la pócima perfecta
y se vestía de girasoles…
en ese patio de jazmines.
…y a ese,
el de mi madre…
donde ella mezclaba acuarelas entre sus amapolas
convirtiéndolas en salsas de tomates…
…y aquellos donde jugábamos
a la ronda con amigos y el arroz con leche…
...puro-amor-encanto-y-magia.

El de aquella vez…
donde éramos todos
…y ese otro,
el de mis realidades cotidianas muchas veces…
…sola…
y con mis sueños bañados de esperanzas…

El de mis casas…
esas…
de los puntos cardinales,
confundiéndose con mis puntos suspensivos…
de romeros para la buena suerte
previniéndome de los pronósticos augurados…
…de suspiros transformándose en silencios
de hemisferios….
que se encuentran con la luna en creciente
…y aquellos que se extrañan…
y juegan a las escondidas las penas bajo los sombreros…
…algunos con jardín de lupinos y retamas
y aquellos otros…
de mares y balcones.
el que define mis mañanas llamándose:
“Puchero”
…!! y que nunca haga falta ¡!!

Y ese otro…
donde se cuece el azúcar
y luego yo lo bautizo: con documento a caramelo…

Donde a las ausencias
...aprendía a comprenderlas
…y a los reencuentros
los bailamos alevosos y descarados
perfumándolos…
con canela y miel de flores y caña…

…aquellos en donde brindo por la vida…
con las uvas de vides conocidas y extrañadas…
…y algunos que tal vez,
hacen que recuerde tiempos de infancias con sabores
verdes de olivos
o tostados como el puré de mil manzanas…

Siempre me han gustado los calderos
…esos
……………los que hacen a la vida.


Pilar Ferrer- Ushuaia-Tierra de Fuego- Argentina



  


Una pregunta







¿Quien eres tu
que a convencerme viene
de la ilusión de la vida
y generosidad  de la muerte?.

¿Quien eres tu que
pernoctante llegas
y cargado de inquietudes
me desvelas?.

Tiempo que viene, llega…
tiempo cargado de inquietudes.
¡Tiempo que vuela!.

Y en la noche,
al despertar,
las ideas permanecen
Inquietantes…
sin poderlo remediar.

Déjame en mi velar
manteniendo mi entereza…
aún hay mucho caminar.







Rafael Serrano Ruiz- Madrid- España






Mejilla con mejilla








A veces me despierto
y estás allí, a mi lado, desnuda y hermosa.

y estás allí no porque hayas venido,

si no porque no te fuiste, porque estuviste en mis sueños 

toda la noche, dejando que me enrede en tu cuerpo,

que cuente cada una de tus pestañas
y me acurruque en cada uno de tus poros
dejando que vuele en cada una de las caricias
que jamás podré pintar para ti,

porque jamás dejarás que para ti las pinte.
A veces camino bajo la lluvia y noto tu mano
engarzada a la mía, mojándote a mi lado,
compartiendo la lluvia fresca en la cara.
y noto todo eso, no porque vengas y cojas mi mano,
y la engarces con la tuya, y compartas la lluvia conmigo,
no. simplemente estás allí porque jamás
te vas de mi lado cuando salgo,
como el aire me acompaña siempre
y alimenta mis pulmones.
A veces, en mi habitación,
pongo una música, aquella que a ti te gusta,
y tú la escuchas acurrucada
bajo la luz de la lámpara de mi escritorio,
o entre las sábanas de mi cama,
o disfrazada de ángel entre el rumor
del silencio de la estancia,
y entonces me dirijo a ti y te digo
¿quieres bailar conmigo?
y tú te pones tus zapatos de nubes,
y yo me pongo mis pies de enamorado,
y nuestros cuerpos son uno solo, mejilla con mejilla,
cheek to cheek al ritmo de la música.
Y no es que tu vengas y te acurruques
bajo la luz de la lámpara, o te disfraces de ángel,
no, es que jamás te vas de mi lado cuando estoy
entre las paredes de mi habitación,
porque eres parte integrante de mi misma esencia,
como lo es mi nombre o mi aliento,
como lo es mi piel y mis latidos.
A veces te beso recostado contigo
en la arena de la playa,
labio con labio, boca con boca,
aliento con aliento, alma con alma,
bebiéndote con delirio,
hasta que la multicolor pompa de jabón
estalla en el aire, y me doy cuenta
que no hay playa, ni arena, ni beso,
ni tú tan siquiera en mí, ni yo tan siquiera en tí
porque no formo parte ni de la cienmillonésima fracción
de un átomo de tu pensamiento.
A veces pienso, que soñar, caminar o vivir sin ti,
es como hacerlo sobre una tierra
que ni siquiera existe, e inventarlo todo,
como un niño jugando sobre la alfombra de su cuarto
al calor de una chimenea en un frío día de invierno...




Ramón Pierrá Orozco (mon). Barcelona- España









Encendida y silvestre








Encendida y silvestre
palpitante
la esperanza
su mirada puesta en el futuro
y en el azul laguna de tus ojos.
Tal vez vaya al encuentro
del sol amanecido
y justo al alba
fuguen las sombras
de mi centro
refugio nido.
En la aurora prometida
tenderé la piel
sobre mi mesa
acaso mañana
sea posible el pan
quizás modele en barro
el cáliz de tu vino
y celebre el viento
que impulsa el vuelo de mis sueños










Silvia Nora Rodríguez- Buenos Aires- Argentina







Vida











No pienses que habitaré en las sombras
cargada de huesas blancas
Adherida en noches de lluvia por cenizas 
de otros tantos
ya dispersos y fragmentados.
Confía. Cada amanecer ascenderé
en el soplo del viento Encapsulada
en  granos de polen. Hurgando 
cada rama de los árboles.
No pienses 
que me oxidaré angustiada
en la herrumbre de las entrañas.
Muy a tu lado siempre estaré: 
Vida.




Tatiana Aguilera- Santiago de Chile- Chile









Quizás muchos poemas por contar:






Quizá haya tantos poemas,
tantas cosas que aún no he dicho,
por más que el corazón te las guarda,
con inigualables y celoso afán.-
Quizá contártelos en pequeñas cuotas,
hace que el amor estalle,
todos los días,
y que anheles mis manos,
así como yo las tuyas,
para que los sentimientos fluyan,
como lo hace las aguas del río,
que incansables corren su cuerpo al mar.-
Aventura de vivir,
dirán algunos,
enigma del cielo, otros,
más tú y yo,
y tan solo tú y yo sabemos,
que esperar con ansiedad los pequeños detalles,
hace que el amor estalle todos los días.-
Quizá haya tantos poemas,
tantas cosas que aún no he dicho,
por más que el corazón te las guarda,
con inigualables y celoso afán,
más en todas y cada una de ellas,
siempre un delicado detalle te sorprenderá,
y el amor estallará todos los días.-










Víctor Kartsch Brenh-Encarnación -Paraguay











Oh Dios, qué Religión rige la suerte












Oh Dios, qué Religión rige la suerte
del inocente que tu mundo ha herido!
Mejor pensar que nunca has existido
y nadie podrá nunca conocerte.
Nací para morir ¿Y he de quererte
aunque me sienta reo de tu olvido
soñando el paraíso prometido
cuando a mi alrededor reina la muerte?
Se paga con la vida el ofenderte
y si tu Valedor es diferente
es pena de martirio el adorarte.
¡No sé, desesperado, comprenderte!,
Siento, razono, grito inútilmente…
para encontrar la Paz… ¡Debo ignorarte!

Luchar por mis hermanos sin temerte
es cuanto puedo hacer en esta parte
de mi angustiado mundo… ¡Fatalmente!








Xavier Coderch Vives Barcelona -España











Lista de autores Marzo





Autor
número
titulo



Alejandro Alagón
52-1
Un vendedor controla…
Ana Romano
52-2
Revelación
Antonio Monzonís Guillén
52-3
Jarras de sangre
Beatriz Ojeda
52-4
Amante clandestino
Carlos Alberto Giménez
52-5
Deja palpitar en tus labios…
Carmen Guzmán Cedeño
52-6
Me vestiré de Lluvia
David Reverte López
52-7
Diáspora
Diana Luz Bravi
52-8
Viento
Diego Santiago Cazzaniga
52-9
Traición
Elena Paso
52-10
Que mi olfato me devuelva el aroma…
Enrique Spinelli
52-11
Marmorato
Ezequiel Feito
52-12
Nocturno
Grissel Canche Albornoz
52-13
Divino amor…
Héctor Berenguer
52-14
La casa de los ecos
Ingel Lazaret
52-15
La vida
José Manuel Caballeno
52-16
Entra la noche
Laura María
52-17
Devuélveme mis sueños
María Isabel Zapata Rives
52-18
La otra orilla
María José Acuña Beláustegui
52-19
Vampiro
Mayte Sánchez Sempere
52-20
Poema interminable
Panolillo Díaz
52-21
Te miro
Pastora Edurgo
52-22
Me rindo
Pilar Ferrer
52-23
Calderos
Rafael Serrano Ruiz
52-24
Una pregunta
Ramón Pierrá Orozco
52-25
Mejilla con mejilla
Silvia Nora Rodríguez
52-26
Encendida y silvestre
Tatiana Aguilera
52-27
Vida
Víctor Kartsch
52-28
Quizá muchos poemas por contar
Xavier Coderch Vives
52-29
Oh Dios, qué Religión rige la suerte